Generalmente, un embarazo de alto riesgo implica que una mamá y su bebé tengan mayores probabilidades de sufrir complicaciones durante la etapa de embarazo o el parto.
En realidad, un embarazo de alto riesgo no significa necesariamente que todo saldrá mal, simplemente que se necesita recibir atención especial y cuidados adicionales.
Los motivos por los que se dan los embarazos de este tipo son muy variables, solo el 10% de los embarazos son considerados de alto riesgo.
¿Por qué se dan los embarazos de alto riesgo?
Muchas son las causas que provocan los embarazos de este tipo, algunas son las siguientes:
Edad: Mujeres que se embarazan a muy temprana edad y aquellas que lo consiguen después de los 35 años.
Hábitos o estilo de vida: El hecho de beber alcohol, fumar o usar drogas.
Padecer enfermedades como: síndrome del ovario poliquístico, hipertensión, diabetes, VIH, toxoplasmosis, hepatitis, entre otras.
Diabetes gestacional (diabetes que se desarrolla durante el embarazo).
Preeclampsia (presión arterial alta después de la semana 20 del embarazo).
Eclampsia (convulsiones que se dan durante el embarazo).
Gestación múltiple (gemelos, trillizos, etc.).
Parto prematuro anterior (si en un parto anterior la mamá dio a luz antes de la semana 37 de su embarazo).
¿Cómo puedes detectar si tu embarazo es de alto riesgo?
Lo puedes descubrir de dos formas:
Acudir a una consulta de control prenatal, ya sea antes de estar embarazada o durante tu embarazo.
A partir de un análisis de tu historial médico, ya que así, como doctores, podemos realizar estudios (ecografías, biometría hemática, estudios genéticos, niveles de glucosa, urocultivo, ultrasonido, etc.), que nos revelen la existencia de cualquier enfermedad.
¿Cuáles son los síntomas?
Algunas señales que pueden llegar a indicarte que tienes un embarazo de alto riesgo son:
Dolores de cabeza intensos
Dolor abdominal
Secreción vaginal
Contracciones irregulares
Sangrado vaginal
Dolor o ardor al orinar
Si es que presentas alguno de estos síntomas no te automediques, acude de inmediato a una consulta para poder dar solución inmediata al problema.
¿Cómo puedes prevenir un embarazo de alto riesgo?
Para reducir el riesgo, toma estas medidas:
Acude a todas tus citas médicas de control prenatal
Modifica los hábitos poco saludables
Mantén un peso equilibrado o disminuye tu peso (si padeces obesidad)
No fumes, no bebas alcohol, ni consumas drogas
Trata aquellas enfermedades que padeces con un especialista
Evita automedicarte
Planifica tu embarazo
Aliméntate saludablemente
Si estás embarazada acude a una cita para recibir orientación médica que te garantice una buena salud para ti y tu bebé. Si aún estás en la etapa de planificación, es importante que analicemos tu historial médico y antecedentes para detectar a tiempo posibles señales de riesgo y realizar ajustes en tu estilo de vida con el fin de lograr un embarazo exitoso.
¡Recuerda que un buen control prenatal es la clave para detectar cualquier tipo de anomalía y así tener un embarazo feliz, saludable y libre de riesgos!
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